El antecedente directo de nuestros modernos bloques de pisos se halla en las insulae romanas.
Las insulae eran bloques de viviendas de IV o V pisos, con escaleras, ventanas, balcones al
exterior, y un patio interior para que la luz llegase a las habitaciones. En la planta baja se
instalaban tiendas y talleres con acceso a la calle. Nuestro antepasados de la época romana se
vieron obligados a construir hacia arriba porque la falta de espacio dentro de las murallas de
una ciudad impedía construir a lo ancho.
Los romanos estructuraban sus territorios conquistados en torno a ciudades. En la época
romana la ciudad era mucho más importante que el campo. Hace MM años, nuestro territorio
de Andalucía era el territorio que tenía más ciudades de toda Hispania, de toda la península
Ibérica. En el sur de Hispania la mayor parte de la población vivía en las ciudades. El nº de
habitantes de las ciudades aumentó considerablemente. Pero la extensión dentro de las
murallas no podía aumentar. Entonces, para vivir con la seguridad que daba estar dentro de las
murallas, las familias tuvieron que hacer las construcciones de las viviendas hacia arriba, y así
surgieron los bloques de pisos.
Roma, que hasta el siglo I a. C. había estado gobernada por las familias aristocráticas, comienza
una época de grandes conflictos porque una nueva y numerosa clase de ciudadanos romanos,
exige los mismos derechos que tenía la aristocracia. Para eliminar las tensiones entre ambos
bandos, se crea el primer triunvirato de Roma por el que el gobierno es compartido por
POMPEYO, del partido aristocrático, JULIO CÉSAR, apoyado por el partido del pueblo; y CRASO,
el hombre más rico de Roma. Famoso por haber aplastado la revuelta de esclavos de
ESPARTACO. Craso murió intentando conquistar nuevos territorios en Oriente. Sus enemigos
los partos lo mataron haciéndole beber oro fundido para castigar su codicia. Tras la muerte de
Craso, estalla una guerra civil romana entre Pompeyo y Julio César. Los pueblos hispanos se
vieron envueltos en esta guerra civil romana porque tanto Julio César como Pompeyo
recurrieron a ellos en busca de soldados y de bienes para financiar las necesidades de su
ejército.
Los habitantes de la Ulterior terminaron por odiar a su gobernador Varrón, que era del bando
de Pompeyo, porque les sometió a fuertes impuestos y a forzosos alistamientos al ejército de
Pompeyo, Julio César venció a los pompeyanos en Hispania y liberó a los habitantes del Sur de
pagar tan fuertes impuestos. Con esta decisión, Julio César se ganó toda la simpatía de los
habitantes del territorio de Andalucía de aquella época.
Aunque Julio César había vencido al propio Pompeyo y, por tanto, parecía que la guerra civil
romana había terminado, no fue así. La guerra vuelve a prender en nuestro territorio. Los hijos
de Pompeyo llegan a Córdoba y forman un nuevo ejército. Julio César tiene que volver a
Hispania para acabar con los últimos pompeyanos en una batalla definitiva, la batalla de
Munda. Es en interior de Andalucía, tras la batalla de Munda, donde Julio César termina
haciéndose con el poder absoluto y se convierte en dictador de Roma.
¿Cuál

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